Claves para conocer mejor a mi pareja

Muchas veces damos por sentado que conocemos en profundidad a la persona que tenemos al lado, con quien compartimos a diario, pero ¿realmente nos detenemos a pensar si de verdad la conocemos o solamente suponemos hacerlo?
En más de una oportunidad la rutina de cada día nos lleva por delante, el mundo es así. Aunque el hecho de que vivamos en sociedad, con trabajo, preocupaciones y obligaciones no significa que estas cuestiones tan fundamentales deban dejarse para después. El tiempo de calidad para con el otro es necesario, requiere de un compromiso personal primero conmigo mismo para luego brindar lo mejor que tengo a mi relación, es decir, en mi vínculo con el otro.
¿Por qué es importante conocer a mi pareja?
Podríamos nombrar muchos beneficios relacionados a esto y de hecho serían acertados, pero también podríamos resumirlo en una sola respuesta: es importante conocer a mi pareja porque la amo. Y porque la amo, anhela en mí ese deseo de conocer la esencia de su persona.
Esto permite hacer que esa relación crezca, madure y se perfeccione. Es paulatino y debe darse de manera natural, es decir, no forzada. Pero sí dedicándole el tiempo pertinente y necesario. Sería muy bueno lograr esto de “hacernos expertos en el otro”.
En este artículo queremos proponerles y brindarles claves a tener en cuenta para conocer mejor a mi pareja. Las mismas no son taxativas por lo que podrían agregarse otras. Es fundamental tener en consideración dos cuestiones: en primer lugar, cada persona y cada relación es única, por lo tanto no puede haber comparaciones y no siempre las soluciones ante problemas serán las mismas; en segundo lugar, es requisito innegable la predisposición y la voluntad de adentrarse en este camino de conocimiento de mi compañero o compañera. La decisión será un factor indispensable, ya que si esta está ausente será más complicado poder abordarlo.
Claves para conocer mejor a mi pareja:
- Conocer el temperamento de la personalidad
- Saber qué lenguaje de amor caracteriza a mi pareja
- Qué actividades realiza en su tiempo libre
- Cómo es el comportamiento con su familia y amigos
- Cuál es su Proyecto de vida
A continuación detallaremos brevemente cada uno de ellos a fin de que luego puedan profundizar con más detenimiento ya que hay una gran riqueza al tratarlos de manera detenida y particular.
- Temperamentos de la personalidad. Los seres humanos tenemos afectos y muchas veces la realidad que nos rodea nos afecta de manera diferente. Trabajar en ese conocimiento en relación al comportamiento de mi pareja permitirá saber cuáles son sus debilidades y fortalezas más sobresalientes. Los temperamentos los descubrió Hipócrates y los clasificó en cuatro siendo los siguientes: Sanguíneo, Colérico, Melancólico, Flemático.
Conocer mi temperamento y el de mi pareja podrá ayudarnos a comprender el modo de ser y comportarse ante un estímulo o situación cotidiana o extraordinaria ya que se puede responder de diferentes maneras. También será de gran ayuda a la hora de querer pedir o esperar que el otro sea como yo espero que sea. Cada uno es único y esta herramienta permite comprender por qué el otro actúa de una manera desigual a la mía.
Pero lo más significativo, es que nos sirve para poder complementarnos porque generalmente tenemos temperamentos diferentes o aun teniendo el mismo este se expresa de maneras múltiples.
Por último saber que el temperamento se puede educar pero no cambia y que condiciona aunque no determina nuestra forma de vincularnos, expresar nuestro afecto siendo más pacientes, tolerantes y empáticos.
- Los cinco Lenguajes del amor. Conocer desde un principio el lenguaje de mi pareja, es decir, de qué manera el otro se manifiesta y me da a conocer el modo en que me ama, ahorraría muchos conflictos futuros. Cada persona es única e irrepetible y nuestras vivencias también forman parte de nuestra historia. Si lo que buscamos es saber acerca del otro, esto es fundamental.
Son cinco los lenguajes: tiempo de calidad, actos de servicio, regalos, expresión física, palabras de afirmación. Requiere tiempo primero saber cuál de todos ellos es mi propio lenguaje y luego también el de mi pareja. Esto mejora la comunicación, fundamentalmente orientado al hecho concreto de no pedir o “exigir” cuestiones puntuales que sé que el otro no podrá o le costará brindarme.
No nos comunicamos solo verbalmente, también lo hacemos con nuestros actos, gestos y emociones. Esta segunda clave abordada requiere práctica ya que es algo que se aprehende, es decir, apropiándose de ese conocimiento a través de todos mis sentidos.
Te dejamos este link que contiene más información útil sobre el tema “¿Conoces el lenguaje del amor de tu pareja?”: https://losquelidos.com/conoces-el-lenguaje-del-amor-de-tu-pareja/
- El Tiempo Libre muchas veces es algo que es tomado como secundario, aunque en este artículo queremos resaltarlo. Es fundamental conocer a mi pareja en todos los ámbitos de la vida cotidiana: trabajo, amistades, sociedad y, también, el tiempo libre, entre otros.
Importante preguntarnos: ¿Cómo aprovecha mi pareja este tiempo? ¿En qué lo invierte? ¿Cómo lo hace?
Esta es una clave elemental, nos dará la pauta si es una persona activa, si tiene mucho tiempo libre que desperdicia o, por el contrario, si no puede generar y disfrutar de esos momentos de relajamiento. También, con quién elige invertir ese tiempo, si yo cómo pareja tengo lugar o generalmente no me incluye en sus planes.
Conversar con el otro de esto también es importante, darnos el espacio y generar momentos de “tiempo libre” compartido en pareja ayuda a hacer crecer el “tiempo de calidad”.
- Familia y amigos. ¿Qué lugar ocupan en su vida? ¿Cómo es el trato que les da?
Tanto la familia como los amigos son personas fundamentales en la vida de cualquiera de nosotros. Las relaciones con los mismos también podrán dar la pauta de cómo es la mujer o el hombre que tengo al lado, nuestros actos y comportamientos también hablan de nuestra esencia, de lo que tenemos dentro.
El trato amoroso o no que mi pareja tenga con sus familiares y amigos probablemente también se vea reflejado en el trato que tenga conmigo; del mismo modo, el tiempo que dedique a ellos, se verá manifestado en el tiempo que destine a la pareja.
Primero mi accionar en mi metro cuadrado, luego con el resto. Saber y conocer cómo es en esos ambientes íntimos brindará la posibilidad de conocerlo y conocerla en mayor profundidad.
- Proyecto de vida. Por último pero no menos importante es el tema de hablar, conversar, preguntarle al otro cuál es su proyecto de vida, que es aquello con lo que sueña y anhela en relación a lo profesional, lo académico, lo familiar, lo personal, entre otros.
Generar espacios de charla y conversación profunda, no dejar para después temas trascendentales que pueden conversarse ahora.
Fundamental es ser transparentes y sinceros con eso que queremos, generar falsas expectativas pueden frustrar y dañar mucho a la relación. Conocer el proyecto de vida de mi pareja me permitirá no solo estar al tanto sino saber si estoy dispuesto a acompañar en ese trayecto. Para ello, entonces, también saber cuál es mi proyecto de vida, comunicarlo y así compartir ambos cada uno de ellos.
Esto es un camino, que es hermoso hacerlo juntos, pero siendo conscientes de lo que yo quiero y espero y de lo que quiere y espera el otro. De lo que estamos dispuestos a renunciar y de aquello a lo que no queremos hacerlo.
Como un plus a todo lo mencionado anteriormente, destacar que antes de conocer al otro, es necesario conocernos a nosotros mismos, saber cómo soy me permitirá relacionarme mejor. Les dejamos también este link con un artículo muy enriquecedor sobre “4 claves para conocernos mejor”, https://losquelidos.com/4-claves-para-conocernos-mejor/
Por último evitar caer en el error de creer que conocemos al otro de principio a fin. Estamos en constante cambio, las personas no somos estáticas, por ello es importante y clave la comunicación. Es un proceso que se retroalimenta: SE CONOCE, SE AMA, SE CRECE y ese es el verdadero amor en potencia.
Si amo al otro, nace en mí ese deseo de querer conocerlo para amarlo más y mejor. Sabernos amados por el otro es un regalo y un compromiso que se asume de a dos, de nada sirve que solo uno quiera hacerlo.
¡Se puede, es hermoso, amarnos, haciéndonos expertos en el otro!–
- María Eugenia Gaffet/ @euge.gaffet
Que alegría que, jóvenes como vos y tantos otros, apuesten y estén convencidos de que vale la pena intentar y lograr ser felices de a dos!!! Vamos por más! Vamos por familias íntegras con un proyecto de vida compartido! Te felicito, estoy orgullosa de vos!!!
Hola Beatriz! Gracias por su comentario! Como muchos otros jóvenes, creo y apuesto a esto. A que si se puede y es posible, con trabajo y compromiso. Muchas gracias por leer el artículo y dejar este mensaje! Bendiciones! – Euge
Felicidades Eugenia,,por el tema q desarrollase sobre el noviazgo..: Nadie ama lo q no conoce.:.,,Es imprescindible conocerse durante el noviazgo,,para lograr un matrimonio feliz y para toda la vida…Las claves q expusiste , es básico , El diálogo es un arte q se debe desarrollar para conocerse mejor.Gran aporte para los novios. .Bendiciones.A seguir apostando la importancia de un buen noviazgo, para q haya novios q deseen llegar al matrimonio, para lograr una buena familia… SE PUEDE.!!!!
Hola Julia! Cada cosa escrita es cierta, como vos bien expresaste, el diálogo, el conocimiento propio y el del otro son la base para el noviazgo y su desarrollo. A seguir trabajando y bendiciones para usted también! – Euge
Muchas felicidades Euge! Hermoso artículo desarrollarte. Me emociona saber que en los tiempos que se viven hoy haya jóvenes que se planteen estos temas, que se apueste a formarse en las parejas para poder llegar a formar familias felices .Te animo a seguir adelante y a difundir entre los jóvenes esta propuesta.. Lilian
Hola Lilian! Un gusto saludarte! Somos muchos los jóvenes que estamos en este camino de formación, que apostamos a tener una familia feliz. Gracias por leer el artículo y comentar. Seguiremos en el camino, trabajando. Un saludo! – Euge